¿Despertarse con sed en mitad de la noche? Esto podría ser otro signo de diabetes. La pérdida de líquidos debido al aumento de la micción provoca deshidratación, lo que provoca sed intensa.
Por qué ocurre: El cuerpo pierde agua al orinar con frecuencia, lo que provoca deshidratación incluso al dormir.
Qué hacer: Registre la frecuencia con la que siente sed por la noche. Beber agua ayuda temporalmente, pero la sed persistente requiere una evaluación más exhaustiva.
3. Hormigueo o entumecimiento en las manos y los pies.
Si experimenta hormigueo, entumecimiento o dolor en las manos y los pies por la noche, podría ser un signo de neuropatía diabética, un tipo de daño nervioso causado por niveles altos de azúcar en la sangre.
Por qué ocurre: Los niveles altos de azúcar en sangre prolongados dañan los nervios, especialmente los de las extremidades, causando molestias.
Qué hacer: Informe a su médico de inmediato sobre cualquier sensación inusual, ya que una intervención temprana puede prevenir un mayor daño nervioso.
4. Sudores nocturnos:
La sudoración excesiva por la noche, incluso a temperatura ambiente agradable, podría indicar hipoglucemia o niveles fluctuantes de glucosa.
Por qué ocurre: La hipoglucemia desencadena la liberación de adrenalina, lo que causa sudoración, escalofríos o sofocos.
Qué hacer: Controle su nivel de azúcar en sangre si ya tiene diabetes. Si no ha sido diagnosticado, consulte a un médico para identificar posibles causas subyacentes.
5. Cansancio o inquietud.
¿Se siente inusualmente cansado o inquieto por la noche a pesar de dormir lo suficiente? Un mal control de la glucemia puede alterar sus patrones de sueño reparador.
