El dedo medio se asocia con el hígado, la vesícula biliar y emociones como la ira y la indecisión. Problemas circulatorios, fatiga, cefaleas frontales y migrañas son síntomas asociados.
El dedo anular se asocia con los pulmones y el intestino grueso, así como con emociones como la negatividad y la tristeza. Entre sus síntomas se incluyen problemas respiratorios, asma, problemas digestivos y afecciones cutáneas.
El meñique está conectado directamente con el corazón y el intestino delgado. Se asocia con ansiedad, nerviosismo y preocupación, así como con dolor de garganta, problemas óseos e hinchazón abdominal.
