Síntomas y dolor asociados con un quiste sinovial de la muñeca
Según el Instituto Francés de Cirugía de la Mano, el primer signo de un quiste sinovial en la muñeca es la aparición gradual o repentina de un bulto lleno de líquido. Este bulto crece durante varias semanas, o incluso meses, antes de estabilizarse. Puede ser blando o firme, dependiendo de la cantidad de líquido sinovial que contiene. El dolor no siempre está presente; depende de la ubicación del quiste. Es más frecuente en los quistes traumáticos y en ciertas posiciones (durante la extensión o flexión de la muñeca, o al presionar la palma). En el caso de un quiste sinovial palmar, su ubicación puede causar una compresión dolorosa, acompañada de parestesia.
Tratamientos para un quiste sinovial de la muñeca
En la mayoría de los casos, un quiste sinovial en la muñeca no requiere tratamiento, según el Manual MSD. Un simple seguimiento y el uso de una muñequera para mantener la muñeca en reposo suelen ser suficientes. En el 40 % de los casos, el quiste se resuelve espontáneamente en seis meses, como explica el Dr. Laurent Thomsen en su sitio web. Sin embargo, si el quiste causa molestias significativas debido a su tamaño o ubicación, o si hay dolor, se pueden recetar antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y aspirar el líquido sinovial. No obstante, toda aspiración conlleva riesgo de infección. Además, no previene la recurrencia, a menudo con un quiste de mayor tamaño que el anterior. Por lo tanto, la aspiración debe considerarse únicamente con precaución y tras una cuidadosa evaluación de los riesgos y beneficios.
