2. Bursitis
Las bursas son pequeñas bolsas llenas de líquido que amortiguan los movimientos de la rodilla. Si una de ellas se irrita debido a la presión, un traumatismo o el hecho de arrodillarse durante mucho tiempo, puede desarrollarse una bursitis prepatelar (también conocida como «rodilla de ama de casa»). Esta afección suele afectar solo a una rodilla y provoca una hinchazón notable en la parte frontal.
3. Infección
La artritis séptica, o infección articular, es una afección grave que puede causar hinchazón rápida, enrojecimiento, calor y dolor intenso en una sola rodilla. Generalmente se acompaña de fiebre o escalofríos y requiere atención médica de urgencia. Puede ser necesario drenar el líquido de la articulación.
