Prepara la Taza: Coloca las hojas de orégano en una taza resistente al calor. Si usas orégano fresco, aplástalo ligeramente.
Vierte el Agua Caliente: Vierte el agua hirviendo sobre las hojas. Cúbrelas bien para que se infundan sus propiedades.
Deja Reposar: Cubre la taza y deja reposar durante 5 a 10 minutos. Esto permite que el té libere todos sus beneficios.
Cuela y Personaliza: Cuela las hojas de orégano. Si lo prefieres, añade miel o limón para mejorar el sabor.
Disfruta: ¡Listo! Ahora puedes disfrutar de tu té de orégano, que te brindará múltiples beneficios.
Beneficios del Té de Orégano
El té de orégano ofrece muchos beneficios para la salud. A continuación, te mencionamos algunos de los más destacados:
Propiedades Antibacterianas: Ayuda a combatir infecciones bacterianas.
Antiinflamatorio: Reduce la inflamación en el cuerpo.
