Dostoyevski: Perdonar en silencio… y alejarse para siempre

Alejarse no siempre significa cerrar con odio.
A veces significa decir internamente:

“Te perdono… pero no vuelvo.”

Ese límite no nace del orgullo, sino del amor propio recuperado.

El silencio como forma de dignidad
Dostoyevski entendía que explicarse ante quien no quiere comprender es inútil.
Que justificar el dolor ante quien lo causó deliberadamente es humillante.
Por eso, el silencio puede ser una forma de dignidad.

No todos merecen una explicación.
No todas las heridas necesitan una discusión.
No todas las despedidas requieren palabras.

Hay silencios que no son vacío:
son decisiones firmes.